La carta de motivación en Bélgica, ¿de qué sirve?
Según dos escuelas de Recursos Humanos, la carta de motivación invita al entrevistador a leer el currículum asociado a ella para confirmarle la buena impresión que le había dejado la anterior.
En cualquier caso, el currículum y la carta de motivación van de la mano. Los dos se complementan y deberían estar perfectamente fusionados en un solo documento.
He aquí los principales puntos:
- ¿Quién soy yo?
Esta introducción debe ser corta. Contar quienes sois, vuestra titulación, y la universidad en la que os habéis graduado; en respuesta a la oferta a la que queréis optar o en general. Si echáis esta solicitud por recomendación de alguien que trabaja en la empresa, reflejarlo en la carta.
- Mis puntos fuertes… y los que la empresa está buscando.
Este es el momento de contar las competencias que vais a aportar a la empresa. No contéis aquí todo vuestro currículum, sino los dos o tres criterios más importantes publicados en la oferta o en la página web de la empresa.
¿Quieren un bilingüismo perfecto? Este es el momento de contar los idiomas que habéis estudiado.
En definitiva, señalar en unas líneas los puntos fuertes de vuestro currículum; el entrevistador agradecerá que le facilitemos esta tarea.
- ¡Estoy muy motivado!
Debéis demostrarle al entrevistador que estáis hechos verdaderamente para este trabajo. Ya sea porque su actividad os apasiona, porque sus valores son los vuestros o porque conocéis a alguien que trabaja ahí y os ha dicho que le va muy bien. Este es el verdadero momento de demostrar vuestro entusiasmo.
- Espero que nos veamos pronto.
No olvides que la finalidad de vuestra carta de motivación es muy clara: hacer que el entrevistador os contrate y no tire vuestro currículum a la papelera. Dejad claro que estáis disponibles para cuando lo necesiten y que esperáis verdaderamente poder aportar vuestros conocimientos.