El crecimiento económico de Bélgica se ralentizará hasta la media europea en 2025
Se espera que el crecimiento económico de Bélgica se ralentice en 2025 y se acerque más a la media de la eurozona, según las previsiones de ING Bélgica presentadas el miércoles.
Aunque Bélgica ha superado la media europea desde la pandemia de Covid-19, impulsada por el sector público, se espera que esta ventaja termine con la llegada de un nuevo gobierno y unas políticas presupuestarias restrictivas.
Se prevé que el crecimiento económico de Bélgica sea del 0,7% el próximo año, igualando la media de la eurozona, según ING. Para 2026, el economista jefe de ING Bélgica, Peter Vanden Houte, prevé un crecimiento del 1%, ligeramente inferior a la media europea del 1,3%.
Predice que 2025 será un año más difícil en el frente económico, con un crecimiento que no se recupera realmente y una tendencia a la desinflación.
Influencia de los Estados Unidos
ING señala que la elección de Donald Trump ha creado incertidumbre adicional. No obstante, los Estados Unidos deberían seguir evolucionando favorablemente, mientras que China y, especialmente Europa, que ya están luchando con una serie de problemas internos, tienen que hacer frente a aranceles de importación más altos en los Estados Unidos.
Mientras tanto, los precios de la energía siguen siendo mucho más altos en Europa que en Estados Unidos.
«La situación debería mejorar con el aumento de la capacidad de producción de gas natural licuado (GNL) en Qatar, pero no antes del año que viene», explica Vanden Houte.
A pesar de estos retos, no todo es negativo en Europa. El aumento del poder adquisitivo, impulsado por los aumentos salariales y la disminución de la inflación, es notable.
Sin embargo, no se sabe si esto se traducirá en un aumento del consumo. ING espera mayores tasas de ahorro debido a la incertidumbre económica y al aumento de las reestructuraciones.
La inflación se mantiene
Según ING, la tendencia a la desinflación observada en Europa y Estados Unidos en 2024 está perdiendo fuerza. Las políticas de Trump, como el aumento de los aranceles a las importaciones y las medidas antiinmigración, probablemente impulsarán la inflación al alza. También se espera que suban los precios de los alimentos en Europa.
«No nos dirigimos hacia niveles de inflación muy bajos. Seguimos esperando recortes de los tipos de interés hasta el verano, pero los bancos centrales son más cautos y se centran más en las perturbaciones de la oferta», añade Vanden Houte. ING afirma que los tipos de interés a largo plazo, ya mucho más bajos que los tipos a corto plazo, tienen un margen limitado para nuevas bajadas.
ING también advirtió que Bélgica, junto con Francia, Italia y España, se encuentra en una zona peligrosa debido a los niveles de deuda elevados.
«Si el nuevo Gobierno no presenta un plan presupuestario creíble, el diferencial (la diferencia de tipos de interés con Alemania) podría aumentar», subrayó Vanden Houte.
«La ventaja para Bélgica es que, en caso de tensiones en los mercados financieros, podría recurrir al mercado nacional de capitales repitiendo la estrategia de los bonos del Estado», añadió.
