Cómo enfrentarse a una entrevista de trabajo grupal
Si quieres superar esta dinámica con éxito, no te olvides de los modales, de hablar correctamente y de controlar el lenguaje corporal.
Las entrevistas de trabajo grupal son mucho más comunes de lo que te piensas, ya que son una práctica muy apreciada por los reclutadores. En ellas suelen participar entre 4 y 12 personas, a los que se suman un par de expertos de Recursos Humanos. Durante la media hora que dura la prueba, los candidatos tendrán que explicar cómo solucionarían una serie de supuestos que plantearán los reclutadores. Estos pueden proponer escenarios de la propia empresa para ver cómo se enfrentarían los candidatos a un problema real, como una crisis mediática, un caso de acoso o un producto defectuoso. También pueden lanzar una hipótesis incompleta para crear confusión entre el equipo mientras intentan llegar a una decisión consensuada. Sin embargo, más comunes son las preguntas ficticias. Los reclutadores, en la mayoría de estas dinámicas, suelen entregar a los candidatos una lista con 20 artículos. Entre todos deberán llegar a un acuerdo y decir qué tres objetos se llevarían a una isla desierta y por qué.
Aunque son muchos los que piensan que estas dinámicas se llevan a cabo para ahorrar tiempo y realizar una criba más amplia en el proceso de selección, lo cierto es que esta práctica da a conocer muchos datos de los candidatos que se desconocen en las entrevistas personales, como su capacidad para resolver problemas, trabajar en equipo, liderar o negociar.
Pero, ¿cómo puedo prepararme esta entrevista si no sé lo que me preguntarán ni lo que dirán los otros candidatos? Algunas empresas suelen avisar con anterioridad de que van a realizar este tipo de dinámica, pero esto no siempre es así. Por ello, debes estar siempre listo y mantener la calma.
Lo primero que tendrás que hacer es informarte de la compañía, conociendo su historia, su organigrama y sus trabajos más reconocidos. Esos son los únicos datos que podrás utilizar en esta práctica, ya que cada entrevista suele ser totalmente distinta. Lo que sí debes hacer es seguir una serie de pautas que te identifiquen como un buen profesional:
- Mantén una actitud natural, aunque nunca olvidando el rigor profesional.
- Las entrevistas grupales han sido diseñadas para crear controversia y debate, por lo que no existen respuestas buenas o malas. Opina libremente argumentando tu teoría y no te equivocarás.
- Los reclutadores suelen fijarse mucho en la comunicación no verbal. Cuida el movimiento de las manos, las expresiones faciales, el contacto visual, la postura, etc.
- También es importante el lenguaje para verbal. Por ello, no te olvides de utilizar un tono adecuado, realizar las pausas oportunas y no hablar demasiado rápido.
- Controla los tiempos en los que hablas. Si pasas desapercibido, no conseguirás el puesto, aunque tampoco si has dado la impresión de ser demasiado controlador o prepotente. El truco está solamente en hablar cuando te pregunten o den tiempo para que alguien se exprese.
- Nunca interrumpas ni lleves la contraria a otro candidato. Intenta reforzar sus ideas, incluso cuando no estés de acuerdo con ellas, o realiza matizaciones, pero sin posicionarte en contra de sus opiniones.
- Un aspecto que se valora muy positivamente es recordar el nombre de todos los presentes. Si no eres capaz, puedes realizar un esquema rápido en tus papeles mientras se presentan, señalando algún dato clave que puedas utilizar con posterioridad.
Ten siempre en cuenta que los reclutadores buscan en estas pruebas candidatos con capacidad de liderazgo, que sepan resolver los conflictos y trabajar en equipo. El candidato escogido será un profesional dinámico, asertivo, flexible, persuasivo, empático, educado y con iniciativa, con un amplio nivel cultural y facilidad comunicativa. Además del control emocional, también se valora muy positivamente la capacidad de negociación y la escucha activa.
Fuente: noticias universia