Decálogo para pedir un aumento de sueldo

Decálogo para pedir un aumento de sueldo

Si quieres conseguir un incremento salarial tienes que solicitarlo antes de que se cierren los presupuestos anuales en tu empresa. Poner sobre la mesa qué has aportado en el último año y cómo ha impactado en los resultados de negocio son tus avales para hacerlo realidad.

Alto potencial y voluntad de aprendizaje. Esto es lo que tienes que demostrar en tu carrera profesional y lo que no debes perder de vista cuando solicites un aumento. Y si al final no lo consigues, puede que no sea tu momento o el de la compañía, pero ese par de factores son tu carta de presentación y lo que te convierte en el candidato perfecto para pedir un incremento salarial en cualquier momento. No existen recetas infalibles, este decálogo marca la estrategia más inteligente para lograrlo.

La compañía

¿Qué situación atraviesa la empresa? Si la compañía está en crisis, lo más sensato es que esperes. Por mucho que merezcas un aumento no conseguirás tu objetivo. Pero si está en un buen momento económico o de crecimiento a corto plazo aprovecha, es tu oportunidad.

El momento

La preparación de los presupuestos anuales es el momento óptimo. Averígualo y trata de pedirlo un poco antes del cierre de las cuentas anuales. Analiza también la política empresarial de la compañía, cómo fija los salarios o si existe una política retributiva inamovible.

El interlocutor

Solicita una reunión formal con tu jefe inmediato. Es quien mejor te conoce y quien más capacitado está para valorar tus argumentos. Escoge el momento del día más adecuado y no avasalles. Tu impaciencia no hace más que aumentar los niveles de estrés que ya de por sí tiene un jefe de equipo, en la mayoría de los casos más preocupado por los resultados de negocio que por el sueldo de sus profesionales.

Tu posición

¿Cuánto tiempo llevas en la empresa? ¿Han variado tus funciones?¿Coordinas un equipo?Pon en valor tus logros y la evolución del puesto que ocupas en la organización. Activa en tu superior su honestidad y generosidad.

Tus avales

¿Qué objetivos has conseguido y cuáles has superado? Saber que estás por encima de la media es el mejor argumento para convencer a tu jefe. Ilústralo con datos y hechos concretos que refuercen tu discurso, incorpora también cuál ha sido el impacto de tu contribución en los resultados de tu equipo y de la organización. Evidencia el impacto positivo, las mejoras, ahorros e innovaciones… Provoca la respuesta: la recompensa y el reconocimiento económico.

El planteamiento

Resalta los valores de la empresa y los aspectos positivos de formar parte de un equipo. Interioriza y representa los valores de la compañía. Trabaja la comunicación verbal y la no verbal, esta última supone el 70% de tu mensaje.

La actitud

Firmeza, credibilidad y consistencia en tus argumentos darán como resultado la mejor actitud. Si promueves la subida, siente que de verdad la mereces, que tu jefe lo sabe y que, en la medida de lo posible, lo hará. Debes estar abierto a la escucha y atento a la respuesta. La conexión con tu interlocutor es fundamental. Procura que tu argumento se sostenga con tu humildad. Las peticiones desde un ego subido fracasan.

La negociación

Aporta soluciones, no problemas. Ofrece herramientas al jefe para que pueda argumentar la subida y buscar apoyos. Además, marca la diferencia frente a personas con menor compromiso. Conviene que te informes sobre cuáles son los sueldos en el mercado para perfiles similares al tuyo. Si son superiores, plantéalo como argumento; si no, mejor no mencionarlo. Crea valor, cuenta cuál es y haz ver que sólo estás solicitando lo que honestamente crees que vales. Y, como se trata de dar para recibir algo a cambio, demuestra tu capacidad de trabajo y el deseo de asumir nuevas responsabilidades. No olvides incluir en la negociación los aspectos no económicos como los días de vacaciones, la formación, obtención de seguros o beneficios sociales.

Los errores

No amenaces con salir de la empresa ni anuncies que tienes contraofertas si no es cierto. Si consigues el aumento no lo hagas público. Sé discreto, una ola de peticiones de tus compañeros te hace un flaco favor.

Punto final

Tanto si consigues el aumento como si no, agradece el tiempo prestado y retírate con elegancia. Sigues trabajando en la empresa hasta que decidas lo contrario.

Fuente: Expansión

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