¿Son negativos los viajes de negocios?
Muchos empleos exigen tener que realizar viajes de negocios y hay que saber cómo afrontarlos positivamente
- Viajar al extranjero, tener una reunión de trabajo y volver a viajar en el mismo día es la rutina de trabajo de muchos empleados.
- Este ritmo de trabajo y los viajes constantes pueden tener consecuencias negativas para los trabajadores si no se tienen en cuenta ciertos detalles.
- El empleo soñado de muchos profesionales incluye tener que viajar y visitar otros países, aunque los viajes de negocios suelen desgastar más de lo pensado.
Imagina que prácticamente todas las semanas vieras amanecer desde el asiento de tu avión para coger el primer vuelo de la mañana, en unas dos horas llegar a un país cercano, ir directo a una reunión de trabajo, pasar el día trabajando en otra sede de tu trabajo y volver al avión al final del día, o a primera hora del día siguiente, listo para ir a trabajar.
Si lo piensas, este intenso ritmo, con cambio de horarios y descansos de poca calidad puede afectar a la salud de un empleado, que puede acumular más cansancio del normal y tener pocas oportunidades para realizar hábitos saludables.
Las dolencias físicas y musculares suelen ser el primer síntoma de un ritmo de trabajo intenso, pero también van acompañadas de otras afecciones, como el estrés, insomnio o la mala alimentación.
Un tiempo prolongado con estas molestias pueden derivar en enfermedades crónicas o enfermedades que resten calidad de vida.
Lo que dicen los datos sobre los viajes de negocios:
Las consecuencias de los continuos viajes de negocios y las alteraciones que sufren los profesionales cuyo empleo les obliga a viajar al extranjero con asiduidad son el centro de la investigación llevada a cabo por la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Columbia en Nueva York.
El equipo de investigación estudia la repercusión que pueden tener los viajes de negocio en la salud de los empleados de una empresa, a través de una amplia base de datos de registros médicos, valorados según la frecuencia con la que se realizan viajes por trabajo.
Según sus conclusiones, los trabajadores que pasan más de 14 noches fuera al mes solían presentar alguna de estas enfermedades:
- Depresión.
- Dependencia del alcohol.
- Alteraciones del sueño.
- Hipertensión.
- Dolencias de espalda.
Formas de afrontar los viajes de negocios:
Dada la necesidad de esta actividad para muchas empresas, es vital que tanto ellas como los empleados que deben de viajar, inviertan tiempo y recursos en mejorar hábitos y calidad de vida.
Las empresas pueden diseñar protocolos de actuación que faciliten a los trabajadores el superar las consecuencias negativas de estar mucho tiempo viajando al extranjero.
Cursos de buenos hábitos de descanso o sobre alimentación, así como coberturaspara fisioterapias o mindfulness, pueden facilitar a que el trabajador se sobreponga al jetlag o a pasar tantos días fuera de casa.
La flexibilidad horaria para este tipo de empleados es vital, de manera que puedan gestionar bien su tiempo, entre trabajo, descanso y asuntos personales.
A la larga, para la empresa supondrá una gran ventaja, ya que el empleado se encontrará mejor y más en forma, por lo que no deberá recurrir a bajas médicas y se sentirá más implicado con su labor cuando viaja y debe representar a la empresa.
Fuente: Universia España